Alimentación perceptiva

La alimentación va más allá de nutrir el cuerpo; es una experiencia sensorial, emocional y social. En la Fundación Carla Cristina, promovemos la alimentación perceptiva como una práctica que respeta las señales internas de hambre y saciedad de los niños, fomentando una relación saludable con la comida desde los primeros años de vida.

¿Qué es la alimentación perceptiva?

La alimentación perceptiva implica una interacción respetuosa entre el niño y el cuidador durante las comidas. Se basa en:

  1. Reconocimiento de señales: el niño expresa hambre o saciedad mediante gestos o vocalizaciones.
  2. Respuesta adecuada: el cuidador responde de forma cálida y apropiada.
  3. Fomento de la autorregulación: se fortalece la capacidad del niño para autorregular su ingesta alimentaria.

Beneficios de la alimentación perceptiva

  • Desarrollo de hábitos alimentarios saludables.
  • Fortalecimiento del vínculo afectivo.
  • Estimulación sensorial y cognitiva.

Prácticas recomendadas

  • Ofrecer variedad de alimentos frescos y culturales.
  • Permitir la exploración sensorial de los alimentos.
  • Evitar distracciones durante las comidas.
  • Respetar el apetito del niño.

El rol de los cuidadores

Los adultos deben ser modelos positivos frente a la comida, mostrando actitudes sanas y respetuosas hacia la alimentación, con paciencia y consistencia.

Ve más allá

La alimentación perceptiva es una herramienta poderosa para promover la salud física y emocional de los niños. Ten en cuenta que cada comida es una oportunidad para nutrir el cuerpo, la mente y el corazón.

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